¿Alguna vez pensaste que como consumis tus alimentos
es igual de importante de cuales alimentos sean?
Hoy en día se está estudiando mucho la relación que existe entre el sistema digestivo y el sistema nervioso. Dentro del cuerpo no existen diferenciaciones de sistemas, sino que más bien esto es una regla para poder estudiar como funciona nuestro cuerpo por dentro. Por lo que fisiológicamente todos los sistemas están interconectados entre sí, es por esto que muchas veces ciertas sintomatologías se expresan en lugares donde no se encuentra el desequilibrio raíz, la ansiedad y el estrés es un gran ejemplo, ya que muchas patologías asociadas al sistema digestivo pueden tener un origen nervioso y estar manifestándose en estos otros órganos. Vamos a ver un poco más sobre esto..
Estrés
El estrés (del latín stringere ‘apretar’) es una alteración física o psíquica producida por exigir al organismo un rendimiento superior al normal. El estrés puede deberse a diversas causas, y está favorecido en reglas generales por alguna de las siguientes situaciones:
- Una actitud negativa hacia la vida suele corresponderse con una percepción negativa de muchas situaciones, lo que lleva a nuestro cuerpo a sentir inseguridad y por ende, activar mecanismos de defensa
- Una dieta desequilibrada produce estrés físico e inmunodepresión, y el estrés físico suele producir estrés emocional. Hoy en día se sabe la incidencia de la alimentación en nuestras emociones, más abajo hablaremos un poco más de esto (¡seguí leyendo!)
- Falta de ejercicio físico, de vida social o de actividades con las que liberar el estrés. Esto es muy importante cuando hablamos de salud integral, ya que somos mamíferos y animales sociales, por lo que compartir con pares, disfrutar en tribu también genera neurotransmisores y hormonas que proporcionan armonía al sistema.
El tratamiento del estrés implica trabajar de forma integral, introduciendo cambios emocionales, alimenticios y físicos. Al mismo tiempo el grado de estrés y el deseo de cambiar determinan el nivel de cambio, la voluntad es un componente muy importante a la hora de hablar de modificar costumbres y salir del terreno conocido.
Sistema nervioso entérico
Nuestro sistema gastrointestinal es un tubo largo que se extiende desde la boca hasta el ano. Incluye el esófago, el estómago, el intestino delgado y grueso, el páncreas, el hígado, la vesícula biliar, los conductos biliares, el recto y el ano. Es un sistema complejo, que como ven está formado por muchos órganos que pulsan por el mismo fin: transformar y asimilar los alimentos que ingerimos.
Algo que muchas veces no tenemos en cuenta es que hay tantas neuronas ubicadas en nuestro intestino como en la columna vertebral, a tal punto que alberga lo que comúnmente se llama un “segundo” cerebro: nuestro sistema nervioso entérico (SNE). Si bien nuestras entrañas no piensan estrictamente hablando, procesan y comunican información de manera absoluta, y pueden tomar “decisiones” de forma independiente. No solo experimentan emociones, sino que también pueden afectar nuestro panorama emocional.
Muchas medicinas originarias relacionan a los intestinos con nuestra parte más intuitiva, más visceral, por lo que conectarse con esta parte del sistema digestivo, también nos lleva a pulir estos canales de comunicación con nuestra intuición. Poder escuchar lo que nuestra parte animal tiene para decirnos, también es escuchar a nuestros intestinos.
El cerebro y el intestino procesan la información que el otro proporciona e inician respuestas no solo dentro de sus propios órganos y sistemas, sino también en otras partes de nuestro cuerpo, es decir, trabajan juntos no solo para regular y llevar a cabo la función digestiva normal, sino también para liberar hormonas utilizadas en la respuesta del cuerpo al estrés y comunicarse con otros órganos y sistemas, incluido el sistema inmunitario.
Segundo cerebro
La razón por la cual los desequilibrios dentro de nuestro intestino afectan tanto el funcionamiento neurológico tiene que ver entonces con este concepto del “segundo cerebro”.
El segundo cerebro es una red intrincada de más de 100 millones de neuronas que recubren el intestino, lo que nos permite tener “sensaciones viscerales”. Los científicos han descubierto que alrededor del 90% de las fibras en el nervio vago transportan información desde el intestino hasta el cerebro , ¡y no al revés! El nervio vago es un nervio con muchas ramas, que se extiende desde el cerebro hasta la lengua, las cuerdas vocales, los pulmones, el corazón, los intestinos y los genitales; actúa como una vía de comunicación entre el intestino y el cerebro.
En 1921, el fisiólogo alemán Otto Loewi descubrió que la estimulación del nervio vago provocaba una reducción del ritmo cardíaco al desencadenar la liberación de una determinada sustancia. Posteriormente, esta sustancia fue identificada como acetilcolina, el primer neurotransmisor descubierto por los científicos.
Entonces, el SNE (Sistema nervioso entérico) está en constante contacto con nuestro sistema nervioso central (SNC). En el antiguo pensamiento científico, (por suerte cada vez más obsoleto), el SNC era el centro de control del cuerpo: regulaba la función de todos los órganos y sistemas de nuestro cuerpo. Pero como acabamos de relatar entonces, nuestro cuerpo tiene un funcionamiento más entretejido: el intestino y el cerebro dialogan entre sí a través de un enlace de comunicación bidireccional formado por una vasta red de nervios. El cerebro y el intestino intercambian información a través de una calle de doble mano.
Algún tipo de interrupción ó ruido en el intestino puede conducir a una cascada de eventos que resultan desequilibrando nuestro sistema nervioso, de hecho hay muchos estudios que relacionan también este proceso, no sólo con estrés y ansiedad sino con estados de depresión (si, tu estado de ánimo también se ve influenciado con la salud de tu sistema digestivo!)
Cuando nuestro intestino se irrita, esto produce una mayor permeabilidad intestinal, lo que significa que bacterias y toxinas pueden colarse en nuestra circulación sistémica, lo que a su vez agrava el sistema inmunológico, y cual cascada lleva a enfermedades digestivas crónicas, depresión y ansiedad.
Los desequilibrios en nuestro intestino pueden enviar señales a nuestro sistema nervioso central que desencadena la liberación de hormonas y sustancias químicas, como las hormonas del estrés que producen aún más inflamación.
Pero así como los desequilibrios en nuestro intestino pueden conducir a la depresión, reintroducir el equilibrio en nuestro intestino puede significar revitalización de todo nuestro cuerpo.
Plantas aliadas para nuestro sistema nervioso entérico
Si bien venimos hablando que para generar un impacto en esta dinámica es necesario gestionar cambios de hábitos y poder trabajar en la raíz, las plantas medicinales pueden acompañarnos en los momentos de dolor en los cuales la inflamación más aguda está sucediendo.
Estas plantas ayudan aumentando la circulación, disminuyendo los gases, aumentando los movimientos peristálticos y al mismo tiempo relajando nuestro sistema nervioso, es decir activando nuestro sistema parasimpático.
Podemos vincularnos con estas tisanas luego de la comida, para ayudar a nuestro fuego digestivo.
También es interesante considerar a las plantas dentro de una cotidianeidad, por lo que si vengo de días de alimentos que conozco, no son del todo saludables para mi, puedo incorporar estas tisanas bien temprano en la mañana ó luego de las comidas, para favorecer el equilibrio del cuerpo sin que este esté manifestando exactamente una patología.
Algunas plantas:
- Hojas de Melisa (Melissa officinalis)
- Flores de caléndula (Calendula officinalis)
- Hoja de Llantén(Plantago spp.)
- Semilla de hinojo (Foeniculum vulgare)
- Hoja de menta (Mentha sp)
Procedimiento
- Combinar partes iguales de cada planta y guárdelas en un recipiente (recomiendo un frasco de vidrio).
Si no tenés alguna de estas plantas disponible evitalas, pero podés intentar elegir al menos tres. Tener la mezcla guardada va a ser beneficioso para agilizar la preparación de tu tisana. - Cuando sientas la necesidad de elaborar tu tisana, podés poner a calentar 2 tazas de agua hasta aproximadamente los 80°C.
- Mientras se calienta el agua, podés colocar 2 cucharadas al ras de la mezcla de plantas secas en un recipiente resistente al calor, como una tetera, una jarra, ó un frasco de vidrio grande que previamente esté templado en temperatura.
- Verter el agua en el frasco, mezclar y tapar
- Si buscas una toma rápida de tu tisana, dejala reposar 15 minutos y luego podés colarla y tomar. Tendrás disponible dos tazas, por lo que podés tomar una y la otra dejarla para otra comida.
- Recomiendo tomar al menos dos tazas diarias de esta tisana si buscamos acompañar unos días luego de una alimentación disruptora.
Por útlimo si hablamos de aparición de cansancio en relación al estrés, es interesante poder ver ciertas vitaminas y minerales que influyen de forma específica tanto en lo emocional, como en lo físico. Fundamentalmente el déficit de vitaminas del grupo B y C y de minerales como el magnesio, el calcio, el hierro y el Zinc. Tanto las vitaminas como los minerales son imprescindibles para el buen funcionamiento de nuestro metabolismo, pero es importante no superar la cantidad diaria recomendada (CDR).
Resumen
Así como nuestros cuerpos son una red cooperativa en sí mismos, también lo son en relación con nuestro mundo externo. Estamos constantemente en comunicación con nuestro entorno y experiencia, cada uno de nosotros individual y colectivamente responde a la suma de nuestro entorno. Por lo que es muy importante cuando hablamos de desequilibrios del sistema digestivo, poder abordarlo de una forma completa.
En esta nota abordamos las razones por las cuales es importante considerar nuestra forma de comer y como nos encontramos a nivel emocional en el tiempo durante el cual transcurren nuestros desequilibrios, reconociendo y dandole entidad a nuestros pensamientos y emociones como poderosas fuerzas que actúan en todos nuestros sistemas.
Espero que esta nota te haya sido de ayuda
Si te interesa seguir profundizando sobre el tema y estás en la zona de La plata y alrededores te invito a un taller presencial que estaré compartiendo a fines de Agosto, principios de Septiembre sobre Herbolaria aplicada al Sistema digestivo desde una perspectiva integral, haciendo click acá encontrás toda la info del evento.
Muchas gracias por estar
Te abrazo
Daniela